viernes, 26 de junio de 2020

“ES HORA DE DESPERTAR”


-      
En el camino de Jesús ni lo mucho es más, ni lo poco es menos. Los criterios evangélicos son contrarios a los del mundo
“Si quieres ser el más grande tienes que ser el más pequeño”
“Si quieres ser el primero, sé el último”
“Para vivir hay que morir”
“Para tenerlo TODO hay que dejarlo todo”
“Si te abofetean en una mejilla, pon la otra”
No es de extrañar que motive tan poco el camino de Jesús cuando el mundo ofrece: éxito, fama, honores, placer, cosas… El ego siempre quiere más
Los dos caminos ofrecen algo en común: “La felicidad”. Pero hay algo que los hace diferentes.
  • La felicidad que ofrece el mundo es pasajera, temporal, se diluye en cuanto pasa “eso” en lo que enfoqué mi felicidad… Los medios: acapara, triunfa, diviértete, todo está permitido, solo se vive una vez, no pienses, mantente joven, que te sirvan, conoce nuevos lugares, ten nuevas experiencias, luce una imagen radiante, compra lo último que ha salido en el mercado, abandona, aparenta lo que no eres y no tienes para dar envidia, no seas menos que…
  • La felicidad que ofrece Jesús es profunda. Los medios: deja, confía, sal de ti, entra por la puerta estrecha, muere, sirve, permanece, perdona, ten compasión, entrega tu vida…


Por supuesto que para nuestro ego los medios que nos ofrece el mundo son más atractivos pero todos sabemos que no son los más efectivos para lograr el fin que buscamos. Siempre habrá algo nuevo que comprar, un lugar distinto que conocer, una experiencia que probar, un éxito que conseguir…
Fuimos creados para ser felices y perdemos nuestra vida en propuestas que nos obnubilan, en espejismos que se diluyen cuando nos acercamos y los alcanzamos.
¿Hasta cuándo vamos a permanecer dormidos? ¿No es hora ya de despertar?


No hay comentarios:

Publicar un comentario