sábado, 3 de agosto de 2019

"TODO LO HACE ÉL"


¡Qué error tan grande atribuirse el más mínimo éxito!. Ni siquiera controlamos nuestra respiración, y peor cuando dormimos. Nada podemos, nada somos. Él lo hace todo en nosotr@s.

Dejar ir… soltar… cualquier halago, aplauso, felicitación…
Dejar ir… soltar… cualquier logro, triunfo…
Dejar ir… soltar… el querer compartir con otros todas nuestras hazañas en favor de otros
Dejar ir… soltar… el vanagloriarnos de lo que no es obra nuestra

Deseamos amar y servir pero no hay nada que hagamos que no sea iniciativa y obra suya. Nuestra tarea es únicamente dejarle ser y hacer… y no apropiarnos de lo que no nos corresponde porque eso nos “pierde” y nos hace situarnos en el centro, perdiendo de vista a Dios o poniéndole en segundo plano.


¡Cuántas veces escucho sobre el deseo de agradar a Dios! ¡Como si hubiera que esforzarse! Nuestra tarea se limita a abrirnos a su amor y dejarle ser y hacer. “Lo de Dios” no supone ningún esfuerzo… sale solo, se siente el impulso, se da con suavidad…
Tenía un mes de no escribir… “cero inspiración”… Lo he vivido con una gran paz, sé que la obra no es mía. El Espíritu sopla donde quiere y cuando quiere y sé que actúa en todo y en todos de muy diferentes maneras. Nadie es indispensable. Estamos temporalmente en este planeta. Mi esperanza y alegría es saber que seguirá actuando en el mundo cuando ya no esté y así será siempre

2 comentarios:

  1. Dios es el Dueño y Señor de todo. Nada ocurre sin que El no lo quiera. A El sea toda la honra el honor y la gloria por siempre.

    ResponderEliminar