Ayer en una charla nos preguntaban porque hay gente que no tiene
fe. Es curioso, siempre sorprende, hasta Santa Teresita se cuestionaba sobre
ello. Las respuestas fueron de lo más variopintas: Porque no se transmite,
porque no está de moda, porque hay mucho sufrimiento en el mundo… Para mí es un
misterio, en mi corto entender la fe es un don. El por qué unos tenemos fe y
otros no, solo Dios lo sabe y yo no lo puedo explicar. Sí que alcanzo a darme
cuenta de que teniéndola, si no se alimenta y se buscan compañeros de camino, acabará
muriendo.
Muchos recibieron el don y creyeron en su momento pero, las
adversidades e incluso las desgracias y sufrimiento ajeno, unidos a la falta de
medios para que creciera y se fortaleciera, acabaron ahogándolo.
Hay quien concibe los problemas o el sufrimiento como un obstáculo
para creer: terremotos, inundaciones, enfermedades, desempleo, pérdida de seres
queridos… Pero allá donde unos ven un obstáculo otros encuentran una
oportunidad. Oportunidad de crecimiento, de comenzar a mirar de otra manera, de
reorientar la vida, de encontrarle sentido a lo que se hace, de abrazar la fe
confiando y agarrándose a un Dios que encarnándose tampoco pudo evitar el
sufrimiento de los otros y de Él mismo.
El cómo miremos dependerá de las gafas que nos pongamos, de cómo o
de qué queramos ver, de asumir la responsabilidad o echar la culpa a otros o a
Dios de lo que nos pasa o sucede en el planeta, de seguir creyéndonos poderosos
y autosuficientes o de caer en la cuenta de lo poquito que somos y lo
necesitados que nos sentimos.
Ese sufrimiento por el que quizás estamos atravesando en este
momento es un medio para reconocer nuestra pequeñez, nuestra finitud, nuestra
vulnerabilidad… para acercarnos al Dios de Jesús (pobre, débil, frágil…), para
abrirnos a su amor, para despertar a amar… ¡Qué fácil parece decirlo!. Pero es
posible. He sido testigo de muchas vidas que en situaciones extremas han sido
un ejemplo de una fe inmensa. En vez de rechazar a Dios, de enojarse con Él, se
abrieron a su amor y a su providencia descansando en sus brazos.
El sufrimiento es algo por lo que todos pasamos tarde o temprano.
Las situaciones adversas se presentan continuamente. Ante estas realidades:
¿Cuál queremos que sea nuestra actitud?, ¿Cómo vamos a vivirlas?.
Gracias 🙏🏽🤗
ResponderEliminarSi tienes, Fe, no la, pierdas. Porque Dios te la dio a ti. Agárrate a ella, en las penas y en las alegrias. Con El todo te ira mejor.
ResponderEliminarCarta a los Romanos 5:3 Al mismo tiempo nos sentimos seguros incluso en las tribulaciones, sabiendo que la prueba ejercita la paciencia,
ResponderEliminarCarta a los Romanos 5:4 que la paciencia nos hace madurar y que la madurez aviva la esperanza,