lunes, 4 de marzo de 2024
“¿QUÉ SERÍA DEL ÁRBOL SIN SU AGUA?”
¿Qué sería del árbol sin su agua?. El árbol es un ser pequeño,
dependiente, necesitado. Sin su agua moriría.
El ser humano sin Dios también está muerto. Le falta lo más esencial, lo
que da plenitud a su vida. Se siente vacío, perdido. Busca algo que calme su
sed y en su afán de probar y de poseer todo, se confunde más y más hasta
sentirse derrotado.
El ser humano también es pequeño comparado con la grandeza de su Señor,
también depende de Él, necesita de Él. Sin Él deja de ser.
Necesitamos de esa agua, de ese Dios, que aliente nuestra esperanza, que
de sentido a nuestra historia, que nos mantenga alegres y de paz a nuestro
pobre corazón.
Sería bueno preguntarnos:
·
¿Dónde estamos plantados?.
Quizás, si hemos echado raíces en terrenos secos, convenga buscar otros suelos
o la ribera de algún río.
·
¿Damos frutos?. Está claro que no
dependen de nuestro esfuerzo sino del agua que nos nutre. Si buscamos y tomamos
de esa agua, los frutos vendrán solos. No se trata tanto de hacer sino de
dejarse hacer por quien quiere llenarnos y darnos vida.
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Preciosa reflexión.
ResponderEliminarGracias Gloria.
Me gustaría compartirlo pero igual hay que pertenecer al blog