Es
muy fácil pedir aquello que necesitamos y no implicarnos. Es muy cómodo eludir
nuestra responsabilidad y la delegarla en aquel a quien solicitamos aquello que
deseamos
Lo
mismo sucede en la oración a la hora de presentar nuestras peticiones. ¿Te
comprometes en aquello que pides, pones de tu parte, o esperas el milagro de
brazos cruzados? ¿Oras a un Dios que está contigo, que te apoya, te ama y te provee
de lo que te conviene o a un “dios mago” que satisfaga tus intereses o quereres?
A
Jesús le sigue una gran multitud, quiere que todos coman porque están cansados
y tienen hambre. Un muchacho tiene cinco panes de cebada y dos peces. Todos
acaban saciados y sobra alimento.
Pide
en tu oración pero con la humildad de quien se siente pequeño, dependiente y necesitado.
Pide
con la confianza de que el Señor, por el amor que te tiene, es el primer interesado
en tu felicidad
Pide
ofreciendo lo que eres y tienes y el Señor lo multiplicará.
Sé
generos@, entrega tu vida y el milagro se dará
Nuchas gracias Gloria ❤😭
ResponderEliminarGracias .Bendiciones un fuerte abrazo.
ResponderEliminarGracias.Feliz dia.
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