miércoles, 29 de julio de 2020

“EL MUNDO ESTÁ ENFERMO”



El mundo está enfermo por falta de amor. Nuestros bloqueos, resistencias y miedos impiden al amor fluir. No somos cauces del amor y las consecuencias las estamos padeciendo todos.

¿Qué podría sanar a nuestro mundo? Abrirnos al amor: sabiendo recibir y agradeciendo lo que se nos da, y compartiendo lo que somos y tenemos sin límites, sin cálculos, sin condiciones.

Abrirnos al amor que se nos regala implica:
  • Acoger el perdón sin límites de Dios, su ternura, su abrazo, su compasión…
  • Aceptar el cariño de los otros expresado y manifestado por medio de palabras, gestos, detalles, oraciones…

Pero para ser cauce, para que el amor fluya, es necesario que no nos quedemos con todo ese amor sino que de la misma forma que lo recibimos lo donemos
  • Amar a Dios sobre todas las cosas ofreciendo cuanto somos y tenemos sin desconfianza, sin reservas
  • Amar a los otros especialmente a los más vulnerables o a quienes son más necesitados que nosotros, acogerles y aceptarles tal y como son, compartir con ellos nuestro haber y poseer
  • Amarnos: escuchando y atendiendo nuestras necesidades básicas, cuidando nuestra salud física, psicológica y espiritual, sabiendo equilibrar trabajo y descanso, perdonando nuestros errores, caídas, imperfecciones.
  • Amar la creación


El mundo está enfermo y tú y yo podemos sanarlo comenzando con nosotros mismos

Abrámonos al amor para que el amor sea, empiece a expandirse y el mundo recupere el equilibrio con que un día nuestro Padre Bueno lo creó

1 comentario:

  1. Dios es amor y él nos lo regala pero sí es necesario compartirlo estoy de acuerdo contigo Gloria gracias por recordarnos que es ser cristiano.

    ResponderEliminar