Con cada uno Dios se
comunica de manera diferente. Es importante que trates de reconocer el lenguaje
que utiliza contigo y estar siempre atent@. Esto nos ayuda a desechar otras
voces que quieren desviarnos o tentarnos incluso proponiéndonos opciones buenas
pero que no es lo que Él quiere de nosotros.
Los medios pueden ser muchos. Hay quien le descubre a través de los sentidos, con otros se sirve de acontecimientos, personas… con algunos se comunica por medio de sensaciones experimentadas en el cuerpo… y hay con quienes es a través de los sueños como en el caso de José.
En cualquier caso es
imprescindible la atención, estar presente en lo que se vive, ser consciente de
lo que acontece. El ruido, el hacer compulsivo, las distracciones, las
preocupaciones, las expectativas, las prisas… dificultan el encuentro y la
comunicación.
Si queremos hacer su
voluntad no queda otra que estar atentos, escuchar, dejarnos llevar… y confiar
porque un Padre Bueno desea lo mejor para sus Hijos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario